La bibliografía y artículos publicados sobre el tema de los bateyes, migraciones en el Caribe y Latinoamérica y, en forma especial, el caso de los haitianos emigrantes a República Dominicana, es muy extensa. Tanto a nivel local como internacional ha sido objeto de todo tipo de estudios -desde diferentes puntos de vista-, según la perspectiva del analista o institución que hace la publicación.

Reacciones ante artículo de El Nuevo Herald de Miami
ESCLAVOS EN EL PARAISO
sobre bateyes en República Dominicana

"Yo veo en el rostro de los picadores de caña el de Jesucristo roto en mil pedazos por el abuso y la explotación. El batey es un infierno, un lugar infame"
Padre Christopher Hartley

Se dice que el sacerdote que ha hecho estos comentarios ha sido amenazado; una empresa perteneciente al Grupo Vicini, mencionado en el artículo de El Nuevo Herald, emporio de gran tradición en la República Dominicana, afirma que paga a sus braceros ajustado a la ley que no contrata menores de edad y que invierte sumas millonarias en mejorar las condiciones de los trabajadores del azúcar.

Ante tal polémica situación -que ha desatado las más variadas reacciones a nivel nacional e internacional-, ha sido abierto un foro público por el propio Nuevo Herald, donde son diversas los comentarios que se hacen, unos identificándose con la gravedad del problema, otros minimizando la gravedad del mismo, calificando como sensacionalista el enfoque del reportaje, reflejado en titulares como:

Un tráfico humano sin ley / Cercados por la muralla de azúcar / Azúcar amarga en tierra de rico / Una frontera donde la ley suele guiñar el ojo / El duro oficio de transformar conciencias / Tener muchos hijos la "suerte" de los pobres / "Es que aquí hay mucha hambre" / Los niños, condenados a un limbo apátrida / Desnutrición, muerte y azúcar

Aún así algunos de los participantes en el foro escriben:

"No mas diferente, ni mas mal que en otros países donde braceros u obreros se dedican a trabajar en cosechas de los campos en Jamaica, Haití, California, Florida, México, etc.
Y que esas condiciones no son exclusivas de la Republica Dominicana, sino del mundo entero. Donde existan cualquier clase de cultivos. naranja en la Florida, melones en California, algodón en Misissipi, manzanas en Washington, y azúcar en Cuba, sin contar con las minas de West Virgina y las de diamantes en Sur África. Pues me parece, o, mejor dicho se, que esos Haitianos viven y comen mejor en esos Bateyes que en su propio PAIS. Y si no esta conforme o convencido dese unas vacaciones por HAITI, JAMAICA, BARBADOS y el Oriente de Cuba donde todavía existen algunas plantaciones que producen azúcar."

Nosotros pensamos que el asunto debe ser tratado en su justa dimensión, porque el hecho de que existan situaciones similares en otros lugares del mundo, de ninguna manera puede minimizar la gravedad, ni mucho menos justificar el que se den situaciones de este tipo en pleno siglo XXI.

Nota: ver artículo en >> www.elnuevoherald.com dentro de la sección América Latina.

Juan Fco. Carrillo Molina

Nota: el autor de este artículo invita a los lectores del "Il Corriere d' Italia" al 1er Congreso Internacional sobre Realidad Socioeconómica de los Bateyes en República Dominicana que tendrá lugar en la Biblioteca Nacional de Santo Domingo durante los días 14 y 15 de marzo del presente año.

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